En el texto informativo que leímos, nos da a conocer un sin fin de atrocidades que se cometen día a día con los menores de edad, esto es “pornografía infantil”; normalmente las víctimas son mujeres, niños y adolescentes. Quienes incurren a este tipo de sucesos, suelen hacerlo por trastornos psicológicos, por ello, no se dan cuenta del gran daño que causan, convirtiéndose así en una terrible cadena que sigue y sigue sin tener un fin.
Es impresionante el tipo de personas que incurren a la pornografía infantil o abuso sexual, como por ejemplo los sacerdotes; ahí muestran su falta de ética y los valores que a simple vista se ve que no tienen.
Por más que se ha intentado detener este problema no se ha logrado, ya que estas personas suelen dar identidades falsas, lo que para las autoridades se les dificulta, mas no es un imposible.
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